Ya sabéis que la misión de este blog es mostrar lo que hago, nunca la de enseñar pues mi experiencia y mis conocimientos son limitados.
Dicho esto os quiero mostrar mi nueva forma de abonado, pero antes os cuento como he llegado a ella.
A ver, nutro a mis arboles con abono solido, en mi caso Hanagokoro, la idea es colocar las bolas en el sustrato, esta bola al pasar el agua por ella va fermentando y va dejando escapar en el agua que pasa los nutrientes que tiene. Asi es como yo lo entiendo y esto tiene varios inconvenientes para mi:
1º Mucho trabajo para, una vez al mes, cambiar el abono.
2º Afea la presentación del árbol pues se llena de bolas y de desechos.
3º Atrae a pájaros que escaban debajo de ellas para buscar gusanos.
4º El abono solo aporta nutrientes a las raíces cercanas, de ahí que se tenga que ir cambiando de sitio.
Visto esto y estando un día aburrido quise cambiar este sistema por uno nuevo menos engorroso y que yo llamo: "La técnica del calcetín"
Los pasos son:
1º Buscamos un calcetín sin tomate.
2º Introducimos en él el abono orgánico solido.
3º Acoplamos el calcetín a la boca por donde llenamos la regadera.
4º Para que al inclinar la regadera no nos tapone la salida del agua coloco un alambre que fija el movimiento del calcetín.
y listo a abonar.
¿y como funciona teóricamente esto?, pues al llenar la regadera el agua pasa por el abono y este va dejando escapar los nutrientes al igual que lo haría con el anterior sistema. Cuando terminamos de regar el abono al estar en el ambiente oscuro y húmedo del interior de la regadera, fermenta con lo que nos aseguramos que aporte correctamente los nutrientes al agua de riego.
Tiene un inconveniente, en mi caso y con el uso de Hanagokoro el olor del agua de riego es fuerte y desagradable,
¿El resultado?, pues solo lo he probado en Otoño y los tiros de los arboles han sido muy buenos con lo que creo que puede servirme este sistema.
Al hablarlo con buenos aficionados me han contado que algunos usan un sistema parecido, dejando macerar el abono en el agua de riego.
Un saludo
Pues yo me he quedado alucinado, la verdad. Está realmente ingenioso.
ResponderEliminarEn mi caso riego con la manguera, y solo uso regadera para cuando abono con algún líquido mezclado con el agua, pero es cuestión de plantearse tu sistema...En principio las ventajas parecen muchas.
La única duda que se me plantea es la cantidad de abono, y la frecuencia con la que lo renovamos del calcetín.Cuando abonamos un bonsái le ponemos X numero de bolas, y son solo para ese bonsái.
Gracias en todo caso por mostrar las ideas de tu departamento de I+D ;)
Un abrazo
Gracias por tu comentario voy a empezar a probar la renovación de abono una vez al mes, de momento están tirando los árboles a lo bestia. Seguirá informando mi departamento de i+d jeje. Unnabrazo
EliminarMuy ingenioso.
ResponderEliminarLo del olor ya es otro tema.
Un abrazo.
Si eso si pero se va rápido jeje
EliminarYo no sé si pretendes enseñar, pero el caso es que yo aprendo mucho de tus entradas. Yo también uso ese tipo de abono pero tu método es mucho mejor. Lo pondré en práctica.
ResponderEliminarSaludos
Gracias ishi si te ha válido ya para mí tiene sentido esta entrada
EliminarMuy buena idea, para regar con manguera se podría hacer un deposito ensamblado entre la punta de la manguera y la boquilla de riego.
ResponderEliminarHola Jose, buena idea, es básicamente lo mismo salvo que el calcetín influya de alguna manera, es usado jejej
EliminarBuenas Keisha
ResponderEliminarBuena idea, seguro que funciona.
Saludos y gracias por compartir.